La Asociación de Periodistas de León (APL) lamenta y rechaza la decisión adoptada por la parte empresarial de cerrar La Crónica de León a través de la presentación de un ERE de extinción de empleo que afecta a toda la plantilla. En estos momentos representantes de la empresa y de los trabajadores mantienen un periodo de negociación que esperemos redunde en las mejores condiciones para una plantilla que día a día, y a pesar de las múltiples dificultades, ha sacado y saca adelante el periódico.
Según fuentes de los trabajadores, la empresa adeuda entre nueve y diez nóminas a los empleados, después de que hace dos o tres años ya adoptara la decisión de suprimir las pagas extraordinarias de forma unilateral. Esta situación de deterioro de las relaciones laborales ha llevado a varios trabajadores a demandar a la empresa y los jueces están fallando a favor de los demandantes.
La APL quiere recordar que dispone de medios jurídicos gratuitos para aquellos asociados que lo demanden.
Más allá de la penosa situación personal de los trabajadores, la APL lamenta también el cierre de la Crónica de León por lo que representa de pérdida para la libertad de expresión, un derecho constitucional que se sustenta fundamentalmente en la libre concurrencia de medios. Por eso, la sociedad debe ser consciente del significado y el daño que provoca el cierre de un medio de comunicación: algo tan importante como el derecho a la información.
Finalmente la APL hace un llamamiento a la mejor voluntad de la empresa para que facilite cualquier salida que permita la supervivencia de la cabecera La Crónica de León, un medio de comunicación que en estos 27 años de existencia había encontrado su hueco informativo en la sociedad leonesa por méritos propios y, sobre todo, por el esfuerzo de sus trabajadores