Reproducimos este texto publicado en la web de FAPE por Pilar Gómez-Borrero, sobre la importancia de Internet en la construcción de la marca personal de un periodista.
Mucho se ha escrito sobre el impacto de Internet en los medios de comunicación y, en algunos casos, para justificar acciones y actitudes que los propios periodistas asumimos hace décadas mucho antes de que la web 2.0 entrara en nuestras vidas. Lo cierto es que Internet ha sido como el suero de la verdad que ha puesto negro sobre blanco muchos de los problemas que tenía la profesión pero que, nosotros mismos, nos negamos a reconocer.
El primero de ellos fue la renuncia expresa que desde finales de la década de los ochenta vinimos haciendo a la figura del periodista como generador de valor. Entonces, fuimos cómplices de los propios grupos editoriales y asumimos -sin rechistar- labores hasta la fecha propias de otros gremios como los correctores, editores, maquetadores… que atravesaban por su particular reconversión. Nos alejamos de las fuentes, de la firma y de los contenidos y los cambiamos por el periodismo de redacción, de teletipo.
Era más sencillo cumplir con la tarea programada, “apretar tornillos en la fábrica” que salir a buscar la noticia. Nos callamos mientras nuestras carreras profesionales avanzaban. Sin darnos cuenta nos convertirnos en redactores jefes o subdirectores en el periódico pero en periodistas anónimos fuera de la redacción. Incluso, aceptamos sustituir “periodista” por “redactor” en nuestras tarjetas de visita.
Pues bien, Internet viene no sólo a sacar a la luz todo esto sino que nos ofrece el antídoto – y las herramientas – para, veinte años después, volver a recuperar la autoestima, la firma como valor diferencial y poner el periodista en el centro del periodismo. Y muchos ya se han dado cuenta.
Basta darse una vuelta por Twitter, donde un granado grupo de periodistas -lejos del star system pero periodistas con mayúsculas- ya han entendido la importancia de labrarse un nombre como experto en su ámbito de actividad y que Internet te ayuda.
Los hay en todos los campos y disciplinas: financiero -@idebarron, @jemaillo-, político -@iescolar -, tecnología y telecos – @uriondo, @antoniolorenzo -, económico -@I_Garay,@amanda_mars, @lluispellicer, @Javier_Romera, @juantdelgado -, capital riesgo -@quiquecalatrava, @rnicolasg -, corresponsales en el extranjero – @Amparopolo,@EstelaMazo-, jurídico-@cgarcialeon-. taurino -@zabaladelaserna-, gastronómico
-@mfguada-, deportivo -@AS_hmartinez-…
La agenda informativa la están dejando de marcar los grandes grupos de comunicación. La proliferación de los medios digitales, la saturación informativa y el protagonismo del lector en las noticias hace que la cabecera de un medio tradicional pugne por defender su posición. Pero si eres periodista no está de más que te preguntes qué estás haciendo para crear tu propia marca y si no empieza a ser ya un poco tarde. No deberíamos esperar a que la profesión vuelva, sino que los periodistas vuelvan a la profesión.
Hoy más que nunca es necesario poner rigor, criterio y responsabilidad en toda información bajo una cabecera definida pero, sobre todo, bajo una firma con personalidad. Pero esa firma hay que trabajarla e Internet y las herramientas sociales están ahí para quien sepa aprovecharlas.
Andrés Pérez Ortega, asesor de branding personal y de estrategias de posicionamiento profesional advierte del riesgo de convertirnos en profesionales de marca blanca, homogéneos, sustituibles y baratos. Y así lo resumió en un tweet (@marcapersonal): “Para tu empresa, tu imagen debería tener valor. Para ti, tu imagen tiene valor”. El periodista que no haya entendido esto…
Artículo original en FAPE.