l Presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Nemesio Rodríguez, ha reclamado a los periodistas y los medios de comunicación que planten cara a los discursos de odio y rechacen todo intento de sus promotores de involucrar a la prensa en esta estrategia.
En la LXXX Asamblea General de la Federación, que se está celebrando esta mañana en Algeciras, Rodríguez ha advertido de que la polarización que vive la política se está contagiando a los medios y a los periodistas. «Y mi impresión es que aumentará en los próximos meses».
«La polarización conduce al odio y el odio a la división de la sociedad. Debemos estar muy atentos a los discursos de odio, que son la antesala de los delitos de odio», ha dicho el presidente de la FAPE, para quien la hostilidad hacia el periodismo forma parte de la estrategia de los líderes populistas. «El método Trump ha hecho escuela».
A los periodistas, Rodríguez les ha recordado que «no todo vale para atrapar la atención del usuario» y que «informaciones veraces, verificadas, contrastadas con fuentes fiables, contextualizadas y sujetas a los principios de nuestro Código Deontológico, es lo que defendemos y lo que seguiremos defendiendo siempre» desde la FAPE.
Respecto a la situación laboral que atraviesa el sector, el presidente de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España ha destacado en la exposición de su informe que los temores expuestos en la anterior Asamblea General, celebrada telemáticamente el pasado mes de noviembre, se han confirmado. «Alertamos del peligro de que, una vez finalizados los ERTES, vendrían los despidos y así está siendo», ha dicho, aunque ha señalado que, al mismo tiempo, están surgiendo nuevos medios que servirán para paliar el paro y de los que cabe esperar que se consoliden y ofrezcan condiciones laborales y salariales dignas a sus periodistas.
Para Rodríguez, el futuro inmediato de los medios está ligado a que la estrategia de las suscripciones tenga éxito, y ese eventual éxito depende del periodismo de calidad. «El editor que crea que el usuario va a pagar por información basura está abocado al fracaso. Quien paga quiere calidad y sabemos que ese tipo de periodismo y la innovación para adaptarse a los cambios de las audiencias necesitan periodistas bien formados y con buenas condiciones salariales y laborales», ha dicho.
Rodríguez ha explicado cómo ese paso del «todo gratis» al pago de contenidos ha impulsado el movimiento de los editores para que las plataformas comiencen a pagar por el uso de esos contenidos y que, de otro lado, la FAPE está en la pelea por los derechos de autor de los periodistas formando parte de «Seguir creando en digital», y defendiendo que la negociación con las plataformas sea colectiva, ejercida por la entidad de gestión de derechos CEDRO.
De igual manera, ha dicho el presidente, la Federación sigue en la lucha contra la desinformación. Sobre este tema, el vicepresidente primero de la organización, Aurelio Martín, ha explicado que esa lucha se desarrolla en distintos ámbitos, comenzando por la alfabetización mediática con el fin de crear una asignatura en el ámbito educativo y dotar de un espíritu crítico a los ciudadanos, impulsar campañas de concienciación ante la sociedad por la defensa del periodismo como elemento fundamental para combatir este pernicioso fenómeno y solicitar transparencia de las instituciones.
La Federación sigue, además, en la pelea contra la brecha salarial y el techo de cristal, «que a su recorrido histórico suma ahora las estrategias de la ultraderecha para hacer retroceder los avances», ha dicho Nemesio Rodríguez, También, y como una de sus funciones básicas, desde la FAPE, «hemos estado en primera línea defendiendo la libertad de expresión y el libre ejercicio del periodismo, además de otros derechos de los periodistas, fundamentalmente la exigencia de condiciones dignas de trabajo».
Por último, Rodríguez ha recordado en su informe la próxima celebración del centenario de la Federación, que se conmemorará en ocasión de la Asamblea que tendrá lugar en mayo de 2022 en Santander, sede de su fundación.
En conclusión, ha dicho, «la FAPE tiene más que reconocido el papel de organización más representativa de la profesión. No deja de ser un orgullo para todos nosotros».