La presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Elsa González, ha participado en la inauguración del XIV Congreso de Periodismo Digital de Huesca. en su intervención aclaró que “Solo las buenas prácticas del profesional y la empresa pueden fortalecer la credibilidad de los medios digitales. Sin ellas nos convertiremos en una red social. Es la confianza la que garantiza el futuro del periodismo y la democracia a los ciudadanos. La velocidad no puede estar reñida con el rigor, ni la competitividad con la confirmación de los hechos”. 
González ha hecho alusión al último baremo del CIS, que concede a los periodistas el penúltimo puesto en valoración profesional, solo por delante de los jueces. “¿Por qué hemos perdido confianza? –se ha preguntado- Sin duda la respuesta está en la información espectáculo, en la polarización política, en el periodismo de declaraciones, el recurso de cortar y pegar sin contrastar ni investigar, la proliferación del rumor o, directamente, en el ‘todo vale’ en busca de audiencia”.
Para la presidenta de la FAPE, otro factor que favorece el deterioro de confianza en la red es el anonimato, y ha señalado como, “cuando menos paradójico”, que una carta al director plagada de insultos u obscenidades no se publique en soporte impreso y, sin embargo, se cuelgue directamente en uno digital. “¿Es que la red es inferior al papel? ¿El atentado al honor es diferente?”.
Por ello, Elsa González se ha mostrado convencida de que medios y periodistas de la red se deben al mismo código deontológico que el resto, y ha afirmado que “muchos periodistas piden que la FAPE tome cartas en el papel de los periodistas en las redes sociales”.
Tras señalar que la actual revolución por la que atraviesa el sector periodístico “nos convierte en arquitectos de un sistema que crece y no se apea del cambio”, González ha reconocido que “pusimos el punto de vista en el soporte, pero descuidamos el tema clave: aprovechar este potencial tecnológico para servir verdaderamente a la sociedad desde nuestra misión de administrar el derecho de la ciudadanía a recibir una información libre y veraz”.
“Es preciso redefinir el modelo informativo digital, desde el punto de vista de negocio, para ser más competitivo, y desde los contenidos para fortalecer la fiabilidad. Es nuestro futuro, pero esencialmente, es el valor imprescindible para asegurar las libertades y nuestra democracia”, ha concluido.