La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) condena tajantemente la agresión sufrida por la periodista Laila Jiménez, de Telecinco, durante la cobertura informativa de la manifestación del aniversario del 1-0.
La FAPE manifiesta su solidaridad con Jiménez y con todos los periodistas que han sido agredidos en las últimas semanas por ejercer su trabajo durante la cobertura de la actualidad catalana.
La reiteración de estos ataques confirma que determinados sectores del independentismo han emprendido una clara e intolerable estrategia de ataque a los derechos constitucionales a la libertad de expresión y a la información, pilares fundamentales de la democracia. Su objetivo es minar estos derechos y, de paso, debilitar a la propia democracia. Nada democrático se construye sin respetar tales derechos.
Sin libertad de información desaparece el resto de libertades y se cercena el pluralismo necesario e imprescindible para que los ciudadanos puedan formarse su propia opinión.
Estas nuevas agresiones a periodistas confirman que el ejercicio libre del periodismo está sufriendo graves limitaciones en Cataluña, lo que no solo debe preocupar a las organizaciones profesionales del sector, sino también a los responsables públicos y a los ciudadanos.
Los que protagonizan o promueven las agresiones a periodistas buscan imponer un velo de silencio sobre la información, objetivo que es inaceptable en un sistema democrático como el nuestro.
La FAPE insta al gobierno catalán a que condene estas agresiones, tome medidas para que no se repitan y garantice el libre ejercicio del periodismo.
Flaco favor hace a Cataluña y al propio independentismo la estrategia de agresiones a los periodistas. Y flaco favor le hace a la imagen de una Cataluña pacífica, moderada, moderna y avanzada.