La Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha pedido a los periodistas «precaución» a la hora de participar en anuncios de productos financieros u otros productos que «puedan causar un efecto importante» sobre la economía de las personas.
Así lo asegura una resolución de esta comisión recogida por Europa Press en base a una solicitud de apertura de expediente deontológico por la «frecuente» aparición de periodistas en anuncios, sin concretar ningún episodio en concreto de participación en ‘spots’ de profesionales de la información.
Según ha señalado la FAPE, ésta es una actividad «que no compromete» a los periodistas, siempre y cuando «no oculten el propósito comercial» de su participación en anuncios publicitarios que puedan ser «interpretados como mensaje informativo».
No obstante, ha instado a tener «precaución» con asuntos que comparten también la actualidad informativa, como los productos financieros u otros productos que puedan incidir en la economía o en la seguridad o salud de las personas.
«Los sectores comerciales en los que algunos periodistas realizan actividades publicitarias son muy diversos y no todos tienen el mismo grado inicuo de la influencia sobre los intereses económicos de los
telespectadores», ha destacado.
«AFAMADA» PERIODISTA ANUNCIANDO CHAMPÚ
En este sentido, ha aseverado que resulta «evidente que si una afamada periodista» da testimonio de los resultados de un champú para su cabello o de un determinado producto alimentario para su dieta, tal actividad «nada tiene que ver con su función informativa».
«En cambio, la participación en otros sectores comerciales que comparten también la actualidad informativa es un asunto más complejo y delicado, pues la audiencia podría interpretarlo como ejemplo de decisión de una persona bien informada. Es decir, se le supone un criterio de decisión racional y no la mera preferencia subjetiva por un producto de consumo menos trascendente», ha apuntado.
Para la FAPE, éste sería el caso de la participación de periodistas en productos financieros u otros bienes que pueden causar un efecto importante sobre la economía u otros bienes básicos de la persona, como su salud o su seguridad.
Además, ha recordado que «dicha precaución se hace más intensa» si, por la actualidad informativa del momento, la aparición del periodista en un anuncio publicitario pudiera relacionarse con dichos contenidos. «La confianza que su presencia pueda despertar en una audiencia acostumbrada a verle como un profesional solvente y riguroso podría contribuir a simplificar decisiones que deberían tener un curso reflexivo más pausado por parte de los usuarios», ha aseverado.
ACTIVIDADES COMERCIALES EN LOS INFORMATIVOS
Asimismo, en su resolución la FAPE pide a los medios «respetar el carácter profesional» de sus propios periodistas y no utilizarlos en los informativos para actividades comerciales. Además, recuerda que el periodista no debe intervenir en la captación de clientes o en la elaboración de campañas.
«El compromiso deontológico del periodista es compatible con el ejercicio de otras actividades comunicativas siempre que actúe con honestidad y evite que esta doble adscripción suponga una contaminación comercial de su actividad informativa o atribuya a sus tareas promocionales una apariencia informativa», ha concluido