Un informe avalado por el Parlamento italiano desvela que en los últimos 10 años la mafia ha controlado, sometido y amordazado a 2.060 periodistas. Las organizaciones criminales italianas han cometido más de 400 actos violentos contra reporteros solo en 2014 y más de 30 periodistas viven con medidas de protección del Ministerio del Interior, viven con escolta.
Las advertencias pasan por el envío de falsos paquetes bomba, cartas, llamadas telefónicas o en los últimos tiempos el linchamiento a través de redes sociales.