La prensa sigue su desplome a pasos agigantados. Desde el comienzo de la crisis los diarios impresos han visto reducidas sus ventas en más de un 30% y su difusión en casi un 40%. La explicación de los grandes editores es que hay otra manera de consumir contenidos y que en la actualidad ‘tienen más lectores que nunca’. Máxima que ha sido desmentida sistemáticamente por el EGM que aísla el efecto de internet y que mide exclusivamente lectores de diarios impresos.
En esta estadística el sector ha perdido 4,3 millones de lectores. En marzo de 2008 la totalidad de los diarios impresos registraba 15,9 millones de lectores, mientras que en el EGM correspondiente a abril de 2015 –siete años después- no supera los 11,5 millones, un 27,6% menos. La principal explicación es que los lectores han migrado a Internet. El mismo EGM –realizado en base a encuestas- refleja que en 2008 11,4 millones de personas reconocían usar Internet frente a las 25,9 millones de marzo de este año.
Por cabeceras la sangría es mayor en las generalista nacionales que en la prensa regional. En el ranking de los quince primeros diarios por número de lectores Marca sigue siendo el más leído con 2,3 millones de lectores, un 9,8% menos (una pérdida de 262.000 lectores), frente a ‘El País’ que pierde la friolera de 800.000 lectores, un 34% menos hasta los 1,5 millones. ‘El Mundo’ no se queda atrás y se deja 435.000 hasta los 960.000 seguidores.
‘20 Minutos’, el ‘orgullo’ de la prensa gratuita tenía 2,6 millones de lectores en marzo de 2008 y actualmente tiene 1.040.000 seguidores, un 61% menos y un recorte de 1,6 millones de lectores. Dentro de los que más caen encontramos a ‘El Periódico de Catalunya’ que ha perdido 243.000 lectores hasta los 545.000 fieles, un 30% menos en siete años. ‘ABC’ se ha dejado 172.000 lectores en el camino hasta los 495.000, una pérdida del 25%.
Del lado de la prensa regional el único que crece es ‘La Vanguardia’ que aumenta 3.000 lectores hasta los 718.000 seguidores. ‘La Voz de Galicia’ pierde sólo 9.000 lectores hasta los 576.000, mientras que ‘La Nueva España’ se deja 58.000 fieles hasta los 309.000 lectores.