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 «Redes sociales: responsabilidad vs inmediatez», es el título de la mesa redonda que ayer moderó Javier Alonso, presidente de la Asociación de Periodistas de La Rioja y decano del Colegio de Periodistas de esa Comunidad, en el marco de las jornadas que sobre periodismo ha organizado la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), en colaboración con la Fundación Bancaria «la Caixa«. En el debate participaron Ana Rosa Quintana, periodista y presentadora de Telecinco y empresaria de la comunicación; María Teresa Ronderos, directora del Programa de Periodismo Independiente de la Open Society Foundations; y Alejandro Romero, CEO, fundador  y consejero delegado de la empresa de big data especializada en medición de análisis Alto Data Analytics.Ana Rosa Quintana

Ana Rosa Quintana basó su exposición en los influencers, y señaló que los autenticos son Beyoncé, Ronaldo o, en España, Paula Echevarría, que, al final, son vendedores a través de las redes, y no los periodistas ni los medios. «Es verdad que hay periodistas que tienen influencia, pero últimamente los medios de comunicación estamos fracasando bastante en todas nuestras predicciones. El caso más flamante es el de Trump, pero ahí está lo que pasó con Pedro Sánchez en el PSOE. También están todos de acuerdo en el tema de Cataluña, y sin embargo hay un millón de personas manifestándose por la secesión en la calle, convocadas de otra manera y por otras vías».

Según Quintana, es cierto que los periodistas, en algún momento, pueden decir algo que a algunas personas les pueden generar una opinión o hacer que cambien la que tenían, pero «en el mundo de la Comunicación nos conformamos con llamarnos comunicadores».

Además, en su opinión, antes había más influencers entre los medios que ahora, y puso como ejemplo las campañas de El País o de El Mundo, o la influencia, en su momento, de Luis del Olmo o José María García, en el deporte.

Tras Ana Rosa Quintana, llegó el turno de la intervención de María Teresa Ronderos, artífice de una iniciativa periodística que hizo parte de la programación de la cuarta edición del Festival Gabriel García Márquez de Periodismo. Ronderos centró su intervención  en el periodismo de investigación que «se ha tenido que reinventar entero», según explicó, y que tiene ahora unas posibilidades que jamás antes ha tenido, por ejemplo, la de trabajar traslacionalmente,  como se hizo en el caso de los papeles de Panamá. «Es muy interesante ver cómo los periodistas, con muy pocos recursos, con buena organización, buena tecnología y buena capacidad de procesar, alcanzan metas que antes precisaban del trabajo de toda una vida. Ahora con las bases de datos, con los programas… en un rato pueden procesar millones de referencias».

Un periodista de investigación, explicó,  hoy en día puede usar las redes sociales y hacer una investigación de fuentes abiertas. Puede, por ejemplo, geolocalizar. Con las fotos que los propios personajes suben en internet son capaces de seguirle la pista a un corrupto o a un narco mexicanos.

Para Ronderos, las redes y el mundo digital obligan  al periodismo de investigación a reinventarse y al periodista a reeducarse. «Antes era suficiente encontrar los hilos de la historia, investigarla  y contarla bien, ahora tienes que ser consciente de a quién estas entregando esa historia, de quién es tu público, de cómo vas a interactuar con él, de que la historia, cuando se publica, no se termina, sino que es entonces cuando empieza el diálogo».

Por su parte, Alejandro Romero destacó los cambios que ha introducido en el mundo la utilización de los medios digitales, y señaló que hay fenómenos, como el de Trump o Cataluña, que no pueden explicarse sin su existencia. «Hace tiempo, hablabas con gente metida en el periodismo o la empresa y pensaban que en los medios digitales lo que había eran cuatro frikis. A raíz de determinados eventos es cuando esa percepción ha empezado a variar»,  dijo.

Para Romero, la gran transformación que han traído los medios digitales supone dos cambios fundamentales: el primero, la fragmentación en los puntos de contacto entre los medios y las audiencias;  y el segundo, que la gente comenta y opina y se influye mutuamente.

El CEO de Alto Data Analytics también señaló alguno de los problemas que existen actualmente en el mundo digital, como cuando lees una noticia que es falsa en tu facebook  y ante ese hecho no ocurre nada. «Creo que en algún momento va a haber que establecer algún tipo de consecuencias para aquellos que tratan de intoxicar con un fin determinado«, dijo.