Reproducimos íntegro el balance final aportado por quien fuera Vicepresidente para el Bierzo en la Asociación de Periodistas de León.
Estimados
El presidente me ha pedido que sea rápido pero conciso, que explique todo. Ruego, por favor, al señor secretario y a nuestro letrado para asuntos legales . Hasta hace unos años, todo mi conocimiento de la Asociación de Periodistas de León, o más bien, de la Asociación de la Prensa de León como se denominaba, era el reunirse en torno a un cocido maragato en el Hostal de San Marcos auspiciado por el compañero y paisano, Ángel María Fidalgo, ayudándole a veces Astrid Rodríguez y algún que otro colega más. Desde mis primeros artículos en época de bachillerato, hace mucho ya, sí, hasta hoy, poco más de la asociación gremial en mi tierra tenía yo algún tipo de información. De hecho, como complemento a una asociación cultural de mi comarca, la Maragatería, algunos tuvimos a bien crear un Club de Periodistas Maragatos que, tomando la idea del cocido que se celebraba por San Francisco de Sales a nivel provincial, en nuestro caso homenajeaba a un profesional del ramo vinculado a nuestra singular comarca a la par que se disertaba sobre algún aspecto de la profesión o sus tipos de medios para luego publicitarlos en unos modestísimos cuadernillos. Exposiciones y otros eventos tenía para con sus colegas y la profesión.
Cuando Francisco J. Martínez Carrión, presidente hoy saliente, y varios compañeros nos convocaron a una reunión a los que en esos momentos estábamos ejerciendo en Ponferrada y comarca, no pude por menos que sumarme a poner mi grano de arena en lo que fuera menester. De ahí surgió una Gestora, y tiempo después de la Gestora la Ejecutiva que hoy finaliza su periplo. Cinco años en total.
Hemos auspiciado la creación de una Gestora con las nueve asociaciones de CyL, en la que nuestro presidente, que siempre ha delegado en quien os habla esta cuestión, y el secretario provincial, formamos parte de esa Gestora. Hemos insuflado ánimos y prisas para que en el mapa regional o biregional, ahí no entramos, se completase el asociacionismo de nuestro gremio para que,
inmediatamente, no hubiera excusa para retrasar más tiempo la petición de crear un Colegio Profesional de Periodistas.
En este sentido, a los que quedáis o tomáis las riendas de la Ejecutiva y al resto de asociados, quisiera recordaros que el Colegio profesional surge en un momento en que la legislación europea y nacional camina contraria a este tipo de
asociaciones.
Otro enemigo más es el eterno debate de intentar entrar, por parte de otras asociaciones y la propia Fape a veces, de
compañeros trabajadores y colaboradores de medios que no licenciados en periodismo y por tanto no periodistas, en el futuro colegio. Algunas provincias pretenden ganar así poder, representación y fuerza en pro del número de sus asociados dejando abierta la puerta a los no licenciados.
Tened cuidado. Así como políticamente en la convocatoria del Bocyl se dejó clara una serie de requisitos que luego en la práctica se han relajado bastante. Muchos críticos hablan de un Colegio donde no será obligatorio colegiarse para trabajar. Cierto. Pero pensemos siempre en los futuros periodistas.
Si al menos el intrusismo profesional no lo vamos a solucionar porque no somos los propietarios de las empresas informativas qué mejor que dejar las bases de la solución o mejora de la dignidad de la profesión para futuras generaciones. El Colegio tendrá, está llamado a ser, el órgano de prestigio en las nueve provincias. La voz y la cara de la profesión. Y poco a poco, debería ir aportando su fuerza y conocimiento para recomendar y obligar lenta pero inflexiblemente todas esas cosas que sabemos están mal y podrían estar mejor en nuestro gremio, en nuestra profesión.
Muchas veces he asistido a congresos, seminarios y debates sobre si el periodista nace o se hace. Siempre he pensado que las dos cosas. Pero ojo, estamos en una profesión que no un oficio. La vocación siempre prima sobre la fuerza de la costumbre o la técnica adquirida a través de los años. Un compañero puede aprender bien los géneros y las formas periodísticas, pero será periodista si a la vez que aprende la práctica tiene un fondo intelectual previo dirigido a tal fin, e incluso una clara inclinación en su personalidad y carácter.
Desde las primeras escuelas de periodismo del Régimen anterior a las modernas y combinadas facultades universitarias de Comunicación ha transcurrido suficiente tiempo como para que este viejo debate quedara zanjado. El principal problema de nuestra profesión, el desempleo y la precariedad laboral, proviene precisamente de esa mala interpretación de la necesaria apertura social de los medios de comunicación. Las empresas informativas no son estructuras estancas, son sobre todo sociales, de ahí que la participación de los ciudadanos de cualquier clase, condición, etcétera es una necesidad, si bien existen géneros, relaciones contractuales, colaboraciones y puestos de trabajo bien definidos en una realidad cambiante pero clara. Nunca se ha pretendido negar el trabajo de compañeros de redacciones con amplia experiencia y calidad profesional y humana. Incluso siempre se ha pensado en articular de alguna forma un reconocimiento de la APL a compañeros con una dilatada trayectoria periodística hubieran pasado o no por la universidad.
A nivel provincial, y en esto el presidente Paco M Carrión se lleva el mérito por negociar por entonces con el presidente Urbaneja; se deja, como ya sabéis la tesorera, dinero en caja y no se heredan deudas que negociar o condonar como nos sucedió a nosotros. Siempre ha habido un debate sobre si comprar, alquilar e incluso si era necesaria una sede en un mundo cada vez más virtual. El debate, sigue abierto. A título personal siempre pensé en una inversión inmobiliaria digna y mínima. Quizás, mis compañeros de Ejecutiva, más pragmáticos en esto, han tenido razón. Espero que no tengáis que peregrinar por bajos de estadios de fútbol, que un día os tiren los documentos o que los bares, cafeterías y restaurantes, qué haríamos sin ellos, sigan albergando nuestros papeles, nuestras reuniones y nuestros debates.
He desempeñado por expreso deseo del presidente saliente el papel de vicepresidente lo mejor que he podido. Al argumentar en la última reunión de la Gestora el señor secretario que debía de haber un vicepresidente físicamente en León, al estar yo trabajando y residiendo en Ponferrada, se creó otra vicepresidencia. Observo que en la nueva Ejecutiva propuesta se crea específicamente una vicepresidencia para El Bierzo. Bien por los compañeros bercianos.
Precisamente por aquello de aunar la bipolaridad que sufre esta provincia en casi todos los sentidos, propuse y se aceptó unificar la celebración del Patrón. Si bien la idea era ir poco a poco convirtiendo en una pequeña gala el evento, con actuación musical final, premios propios y homenajes a los más veteranos así como el reparto de las publicaciones anuales de la APL, no sólo unos discursos y comer o cenar. No puedo negar que esto sólo se ha logrado en parte. Queda tarea por hacer.
Hemos auspiciado una serie de actos protocolarios, visitado a las principales autoridades, e incluso firmado convenios, en mi caso con una compañía de Cruceros en la Red y con la UNED. En este sentido, explicar que la formación continua que pocas empresas locales dan por falta de medios, muchas veces se suple con iniciativa y voluntad del periodista que por su cuenta sigue estudiando o practicando. Si cada diez años todos deberíamos tener un año de vuelta a la universidad, al menos con los cursos de formación paliamos en una pequeña medida esta carencia que sufrimos en nuestro devenir cotidiano.
En hoja aparte adjunto los datos de los cursos que me ha tocado en suerte coordinar. Simplemente resaltar que casi un centenar de alumnos en cuatro cursos on line con los mejores ponentes posibles sin cobrar salvo una comida, una pluma o unos libros, son un inicio de lo que puede ser y debe ser una formación continua en toda regla.
Entre mis papeles encuentro un listado a modo de programa para la asociación y temas específicos del Bierzo. Un Grupo de Trabajo se creó con los cuatro miembros de la Ejecutiva y dos asociadas, en este caso voluntarias, que he de decir en honor a la verdad, se fue desinflando con el paso de los meses hasta el punto de muchas veces reunirme conmigo mismo.
Estoy seguro de que me quedan muchas, muchísmas cosas en el tintero, pero he de terminar o si no nos cortan la videoconferencia, que es prestada y gratis, como casi todo lo nuestro. Imaginación y voluntad siempre han sido nuestras premisas.
Doy las gracias a todos por vuestro apoyo, comprensión y pido humildemente disculpas por todo aquello que haya podido no ser de agrado de la mayoría.
Hasta siempre,
Alejandro García Nistal