Los cuatro deportistas invitados a la última edición del Foro Periodístico Quevedo coincidieron en una misma cuestión: su motivación es fruto de un apasionamiento extremo por lo que hacen. Incluso, y en el tono divertido que mantuvo todo el encuentro, hablaron de un ‘defecto genético’ que los impulsa a tomar riesgos, sólo por el placer que significa el desafío conseguido.
Los participantes fueron Jesús Calleja, quien ostenta en su haber más de 30 ascensiones en la zona del Himalaya, donde también ha trabajado como guía especializado; Salva Calvo, ultrafondista con carreras en lugares tan remotos como el Desierto de Gobi o la Muralla China; José Ramón Gutierrez, piloto y deportista extremo (acaba de terminar el Dakar) y Carolina Rodríguez, campeona de España de gimnasia rítmica.
‘No hay otra cosa en la vida que te dé estas sensaciones, y lo hacemos básicamente porque nos gusta’, fue el resumen de Carolina Rodríguez sobre la profesión de deportista, quien remarcó que en su caso ‘el factor riesgo’ no es tan importante como en el resto de los presentes. Sin embargo, sí hizo referencia a la presión que implica la alta competición olímpica.
‘En mi caso, el lugar en que llegas ya no es tan importante. El placer está en la lucha por el esfuerzo’, indicó Salva Calvo, mientras que Jesús Calleja no dejó pasar la oportunidad de reclamar mayor apoyo para sus actividades, que implican una publicidad real para la provincia de León.
El resto del desayuno de trabajo, organizado en conjunto por laAsociación de Periodistas, Paradores y la agencia EFE, transcurrió entre divertidas anécdotas de los protagonistas.