La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) hace un llamamiento a los poderes públicos para que abandonen todo intento de limitar el ejercicio del periodismo mediante vetos, en la medida en que impiden que el periodista cumpla una de sus funciones principales, como es la de presentar todos los ángulos posibles de un hecho a fin de que el ciudadano conforme su propia opinión.
Ante las denuncias de varios medios sobre la discriminación a su tarea informativa, la FAPE reclama a los poderes públicos que cesen inmediatamente en esta estrategia, que supone un grave atropello a la libertad de información.
La FAPE viene denunciando el aumento de las trabas a la libertad de información en nuestro país, con referencias concretas a las ruedas de prensa sin derecho a preguntas, las declaraciones enlatadas o la reducción de la libertad de movimiento de losperiodistas en los mítines.
También se ha opuesto al párrafo del artículo 66 de Ley Orgánica de Régimen Electoral General que obliga a las televisiones públicas y privadas a emitir bloques electorales proporcionales al peso de cada partido durante las campañas.
Esta reforma reduce el derecho constitucional de los ciudadanos a la información veraz, que se sustituye por propaganda, e imposibilita el libre ejercicio del periodismo en televisiones y emisoras públicas y privadas. También rechazamos la censura a la que pueda dar lugar esta reforma electoral, según subraya el Manifiesto de Pamplona aprobado el 9 de abril pasado por la Asamblea de la FAPE.
En este documento, la FAPE rechaza de plano la manipulación informativa, venga de donde venga, la ordene quien la ordene, la cometa quien la cometa y tenga la finalidad que tenga, porque es un atentado contra los principios éticos y deontológicos de nuestra profesión, además de una reprobable estafa a los ciudadanos.