La presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), Elsa González, ha considerado imprescindible la presencia de periodistas en los puntos de conflicto, con el fin de que haya una información plural y no se polarice en dos grandes agencias internacionales, mientras que ha lamentado que la crisis esté vaciando las redacciones.
González ha hablado de “Ética de la comunicación y seguridad» en una conferencia dentro de un encuentro anual sobre valores democráticos y Fuerzas Armadas, con el lema: “Seguridad y comunicación: un compromiso ético», celebrado en el campus de Segovia de la Universidad de Valladolid. Después de la conferencia ha intervenido en una mesa redonda junto al profesor del Área de Comunicación Audiovisual y Publicidad de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y de la Comunicación, Rodrigo González Martín, y al capitán de Fragata Federico Aznar Fernández Montesinos, analista del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE).
La presidenta de la FAPE se ha referido a la dificultad de actuar, en muchas ocasiones, con la rapidez que demanda la nueva sociedad de la información, tomando decisiones en minutos y publicando con inmediatez contenidos de gran calado. De ahí que, en su opinión, “sea extremadamente importante que las universidades formen éticamente a los futuros profesionales”.
No han faltado referencias a la crisis en los medios de comunicación que, entre otros efectos negativos, está vaciando las redacciones y también de presencia de profesionales los lugares de conflicto. Según González, “hay decisiones sobre informaciones especialmente delicadas, como las que afectan a la seguridad, que quedan en manos de periodistas aún inexpertos para abordar materias de este calibre”.
En cuanto al papel de las Fuerzas Armadas, ha subrayado que la sociedad espera “transparencia, hasta el límite que permita la seguridad” y se ha mostrado partidaria de que, además de que debe hacerse por una obligación democrática, faciliten información a los medios cuando sean consultadas. La FAPE, de acuerdo con su presidenta, fomenta la relación entre la profesión periodística y las Fuerzas Armadas, con el fin de que exista un conocimiento mutuo. Ha puesto como ejemplo cursos y seminarios, como el de “Seguridad y defensa” que promueven la Universidad y la Asociación de Periodistas de Almería, organizado por la Brigada de la Legión “Rey Alfonso XIII”.
Por la mañana, el director de Comunicación del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), Sergio Sánchez Benítez, aseguró que los españoles deberían sentirse orgullosos “de un servicio como el que tiene España, con unos controles» que garantizan los derechos de los ciudadanos.
Sánchez Benítez, sustituyó al secretario de Estado y director del CNI, general Félix Sanz, a quien le fue imposible viajar tras una reunión imprevista en el Palacio de la Zarzuela, según explicó uno de los organizadores de la jornada y ex-defensor del Pueblo, Álvaro Gil Robles. Según Sánchez Benítez, el CNI se rige por los mismos principios que el sistema democrático, basado, a su juicio, en los «límites, las garantías y los contrapesos». En este sentido explicó que España es uno de los pocos países del mundo donde está regulada la actividad de su servicio de inteligencia, desde 2002, y con la garantía de que su trabajo está sometido al control judicial de un magistrado del Supremo, que es quien tiene que autorizar algunas misiones. Asimismo habló del control legislativo, citando como ejemplo, la reciente comparecencia del director del CNI ante la Comisión de Secretos Oficiales del Congreso de los Diputados.
En relación a la comunicación del CNI, su responsable dijo que siempre «tiene que estas condicionada a la seguridad, no debe ser una cuestión de mercadotecnia política ni de relaciones públicas, sino que daremos información siempre que sepamos que es bueno para la seguridad». El reto, añadió, es mantener la seguridad a la vez que se atiende al interés de los periodistas por conocer informaciones y a la transparencia que demanda la sociedad, una síntesis que denominó como «comunicación estratégica».
En otra de las mesas, el director del IEEE, general Miguel Ángel Ballesteros, indicó que en los conflictos, las relaciones entre militares y periodistas «tienen que basarse en la franqueza, lo que no implica transparencia absoluta». Se mostró partidario de que la información que se transfiera por parte de las Fuerzas Armadas siempre esté basada en la verdad y pidió al periodista que conozca lo más posible los temas de los que está informando.
Por su parte, la periodista Georgina Higueras consideró urgente la colaboración entre medios de comunicación y Fuerzas Armadas, a la hora de informar de misiones, y ha tenido un recuerdo para el corresponsal de El Periódico de Catalunya Marc Marginedas, secuestrado en Siria, hace dos meses, al que también se unió Elsa González.